julio 15, 2022

HOME Nueva - ACES-Andalucia    “Transformar. Cambiar el Mundo” 

Populismo, guerra, hambrunas, epidemias, movimientos migratorios descontrolados… Sin duda alguna vivimos momentos convulsos. Pero todas estas cosas que tanto nos preocupan y a veces incluso nos angustian, son realmente las consecuencias.

Son las consecuencias de otros factores, son las consecuencias de circunstancias que se vienen produciendo desde hace varios años: crisis de valores en la sociedad, búsqueda atroz del beneficio empresarial, fomento desmedido de encontrar la felicidad a través del consumo así como de las relaciones superficiales.

¿Y los docentes, qué hacemos? ¿Qué debemos hacer? Lo primero es adquirir consciencia. Parece fácil, pero no lo es. Los docentes también somos personas que vivimos en esta Sociedad donde el cortoplacismo se ha impuesto, y donde poco a poco -o no tan poco a poco- el esfuerzo, el compromiso, la dedicación,  el trabajo diario, el relacionarse correctamente con tus iguales, tus docentes, tu familia, etc. van perdiendo protagonismo e importancia día a día.

Nosotros somos docentes del centro Santiago Ramón y Cajal, y somos además empresarios a la misma vez. Somos una Cooperativa de Enseñanza ¿sabe la sociedad en general lo que eso significa? Posiblemente no. Las Cooperativas de trabajo -no solo las de enseñanza-, pueden y deben ayudar a cambiar este mundo necesitado de valores. Nosotros creemos que estamos llamados a ello.

A las empresas de hoy día se les llena la boca con la agenda 2030, con la economía verde, con el término calidad, con la satisfacción de su cliente y la felicidad de sus trabajadores, eso que se conoce en términos generales como la Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Existe todo un movimiento sobre esto, el washing o greenwashing. Las Cooperativas no tenemos que entrar en eso, porque la RSC forma parte de nuestro ADN. Y en una Cooperativa de Enseñanza como la nuestra, más; porque no sólo prestamos un servicio educativo, sino que además formamos personas y profesionales para el presente y el futuro (menuda responsabilidad), y si no lo hacemos bien perdemos nuestro trabajo, nuestro dinero y nuestra forma de vivir (eso no ocurre en otros centros educativos, lo podemos asegurar). 

Cuando ustedes puedan escoger y quieran escoger quiénes o qué empresas le van a prestar un servicio, no lo duden si escogen a una Cooperativa de trabajo; con una Cooperativa de Enseñanza no se van a equivocar, ni aquí, ni en Málaga, ni en Sevilla. Nosotros ponemos el foco en lo importante, porque nuestro modelo empresarial lo hace, LA PERSONA. Las personas y sus valores hacen las sociedades, las empresas y el mundo.

Y en este mundo en que lo público y lo privado deben convivir, no deben parasitarse porque se necesitan. En este mundo en que los políticos instalados en el populismo tienden a demonizar al mundo empresarial, y las empresas mercantiles no paran de invertir dinero en campañas para limpiar su imagen y cuidar su Responsabilidad Social Corporativa, existe una fórmula que no se parece a ninguna otra, una fórmula que la sociedad en general desconoce: la Cooperativa de trabajo.

“No hay nada igual que una Cooperativa”

Nosotros -como Cooperativa de Enseñanza, como Cooperativa de trabajo, como empresarios-trabajadores, como maestros y docentes-, tenemos claro que no necesitamos invertir en Responsabilidad Social ni en principios y valores porque lo llevamos dentro. Pero no le dedicamos el tiempo y el dinero necesario para convencer a los políticos y a la sociedad de lo buenos que somos, quizás porque si dedicamos dinero a comunicación, marketing o publicidad, tengamos que quitarlo de parte de nuestro sueldo; y porque tenemos una elevada miopía empresarial (aquí no hay gerentes profesionales, no hay consejeros delegados que ganan grandes sumas, no hay fondos de inversión respaldando el proyecto…). Debemos generar cultura empresarial y creer en nosotros mismos, y dar el salto definitivo para que la sociedad no dude más y escoja Cooperativas de trabajo para generar riqueza y satisfacer necesidades. También para que las Administraciones y nuestros gobernantes no duden e inviertan en emprendimiento cooperativo, que ayudará a poner en marcha el motor de las sociedades modernas y a que las alianzas público-privadas sean por el bien de los ciudadanos en general y no por el bien del capital, de algunos pocos dueños de ese capital y de la mayoría de políticos que nos gobiernan.

Necesitamos un mejor desarrollo social, una mayor cohesión social, y crear más y mejor empleo. Necesitamos hacer realidad la transición energética, la transición digital y la transición demográfica. ¿Alguien piensa que sin las Cooperativas de trabajo podemos conseguir esto? Pues si alguien lo piensa, se equivoca. Las Cooperativas, por su modelo social, pueden ser el verdadero motor para encontrar el equilibrio que hemos perdido, y pueden ser la piedra angular para esta sociedad que cambia muy rápido, que cambia más rápido que las empresas y mucho más rápido que las Administraciones.

 

En la Cooperativa de trabajo TEAR, desde sus centros educativos Colegio Santa Marta y Centro Santiago Ramón y Cajal de Granada, seguiremos sumando a esta sociedad, y también desde las asociaciones y federaciones ACES-Andalucía y FAECTA, que están llamadas a poner al cooperativismo y a las personas cooperativistas en el lugar que les corresponde. ¡FELIZ VERANO! y ¡FELICES VACACIONES!

 

Javier Martínez Morilla